El movimiento Tierra de hombres (Tdh) se enfrenta a una situación sin precedentes en sus áreas de intervención: dificultades de suministro, acceso restringido a las poblaciones, incertidumbre sobre el apoyo de los donantes. La organización de ayuda a los niños está preocupada por las consecuencias de Covid-19 en los niños ya vulnerables. Los riesgos de abandono escolar y explotación son preocupantes. Insistimos en la necesidad de fortalecer las medidas de protección infantil en respuesta a la pandemia.
La pandemia está progresando de manera alarmante. Los centros epidémicos se están extendiendo a la velocidad del rayo en regiones superpobladas, debilitados en términos de salud y complicando un trabajo humanitario ya difícil. El acceso al equipo de protección básico sigue siendo extremadamente complicado. La situación es tensa en todos los países de intervención.
Ya estamos viendo las dramáticas consecuencias de la pandemia en los niños. Más de 1.500 millones* de ellos se ven afectados por el cierre de su escuela. Dos tercios de los países han establecido plataformas de aprendizaje a distancia. Excluidos de la digitalización, un tercio de los niños del mundo corren el riesgo de abandonar la escuela después del parto. Las medidas de barrera amplían las desigualdades y aumentan los riesgos de exclusión. Abandono escolar, violencia doméstica, desnutrición: los efectos del confinamiento afectan a los niños en todos los niveles.
“No todos somos iguales cuando se trata de coronavirus. En un contexto ya frágil, donde 386 millones* de niños viven por debajo del umbral de la pobreza, los riesgos de separación tras las muertes de Covid-19 y la violencia del medio ambiente en el que viven socavan la resiliencia de los niños. El resultado es una gran angustia”, dice Maria Bray, especialista en protección infantil en Tierra de hombres (Tdh).
Una fuente de exclusión social e inseguridad alimentaria, el coronavirus acelera los procesos de explotación, incluida la explotación sexual, el abuso, el matrimonio precoz y la violencia contra las niñas. Los niños detenidos en campamentos superpoblados o detenidos están particularmente expuestos. Su estigma refuerza su sufrimiento psicológico y su estrés. Tdh logró obtener la liberación provisional y medidas de absolución para 410 niños detenidos, luego de su intervención ante las autoridades judiciales.
Hoy, Tdh está adaptando sus medios de intervención y fortaleciendo las acciones de prevención con las comunidades en riesgo. El apoyo psicosocial para los niños sigue siendo un pilar de su acción. La organización está presionando a los Estados para que tengan más en cuenta los derechos del niño en la respuesta a la pandemia; para un acceso equitativo a la información, medidas de protección, atención y educación. Tdh alienta a los donantes a involucrarse más en salvar vidas y fortalecer el trabajo de campo con niños afectados por las consecuencias de Covid-19.
* fuente: Naciones Unidas.
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