12 de junio de 2015
Día mundial contra el trabajo infantil
Trabajo infantil para la importación barata de camarones
En la industria tailandesa de camarones, niñas y niños son duramente explotados. Pelan gambas destinadas a las mesas de consumidores europeos durante más de diez horas al día, seis días a la semana, sin posibilidad de acudir a la escuela o teniendo que trabajar de noche para ir al colegio por la mañana, cansados y sin apenas haber comido. La mayoría de los menores proceden del país vecino más pobre, Myanmar, desde donde cruzan la frontera a Tailandia con la ayuda de traficantes. Como migrantes irregulares, sus derechos son violados. Dependen de la arbitrariedad de sus empleadores y no pueden defenderse cuando sus salarios son reducidos o cuando se les impone trabajar horas extra o hasta la madrugada en situaciones de alta demanda.
Con motivo del Día Mundial contra el Trabajo Infantil, la Federación Internacional Terre des Hommes (FITDH) ha publicado el informe «Niños migrantes trabajadores en la industria tailandesa de camarones» (en inglés). Paralelamente, la FITDH y Tierra de hombres-España, instamos al gobierno español, así como al resto de dirigentes europeos a garantizar que la Unión Europea, sus estados miembros y todos los países del continente hagan uso de su influencia sobre el Gobierno tailandés como importante socio comercial de Tailandia e insistan en la puesta en marcha de medidas verificables para la protección de los derechos de estos niños y niñas migrantes explotados laboralmente.
Al mismo tiempo, se requiere que los comerciantes internacionales de gambas aseguren el cumplimiento con los estándares sociales mínimos en industria de gambas.
“No deberíamos escuchar testimonios como el de un niño de 11 años en la industria de gambas, quien me comentó: “Quisiera llegar a ser médico. Pero nunca va a pasar porque pronto tendré que trabajar. «Deberíamos dar a estos niños y niñas la oportunidad de cambiar su vida”, dice Ignacio Packer, Secretario General de la Federación Internacional Terre des Hommes.
El comercio de camarones ejemplifica la carrera de la economía globalizada, siempre en busca de la producción más barata, con los costes laborales más bajos posibles y sin tener en cuenta las consecuencias sociales y ambientales. Actualmente, la implementación de los Principios Rectores sobre Empresas y Derechos Humanos de la ONU se debate en los Estados miembros de la Unión Europea «Esperamos que los Estados miembros de la UE y otros gobiernos europeos aprueben y apliquen leyes que responsabilicen a las compañías en cuanto al respeto de los Derechos Humanos».
Más información en la web de Tierra de hombres-Alemania miembro de la FITDH que dirige el proyecto de ayuda a los niños, niñas y adolescentes víctimas de explotación laboral en la industria del camarón en Tailandia.
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