Barry, un pequeño senegalés de 12 años, ha vuelto ayer a España para recibir atención médica dentro del programa ‘’Viaje hacia la Vida’’. Es la tercera vez que viaja hasta Málaga para ser intervenido de la estrofia vesical que padece,  esta vez en el Hospital malagueño Carlos Haya, Felipe y Natalia, la familia de acogida que le ha cuidado durante sus estancias en España, le describen como un niño muy alegre.

Por otro lado, tres pequeños que también han formado parte de VhV han regresado esta semana a sus hogares de origen tras haberse recuperado con éxito de sus intervenciones en Madrid. Richard ha vuelto a Togo  después de ser operado del corazón y vivir durante cinco meses con su familia de acogida, Mila y Lorenzo.pequeño senegalés de 12 años, ha vuelto ayer a España para recibir atención médica dentro del programa ‘’Viaje hacia la Vida’’. Es la tercera vez que viaja hasta Málaga para ser intervenido de la estrofia vesical que padece,  esta vez en el Hospital malagueño Carlos Haya, Felipe y Natalia, la familia de acogida que le ha cuidado durante sus estancias en España, le describen como un niño muy alegre.

Mamadou, llegó a Madrid por primera vez en 2010. Desde entonces, entre las más de diez intervenciones que el doctor Rayo le ha practicado en la pierna en el Hospital San Francisco de Asís, ha viajado intermitentemente a Guinea Conakry para ver a su familia biológica. Ahora, se despide de su familia de acogida, Mari Carmen y Ricardo, y de la Fundación, para regresar definitivamente a su casa.

Por último, Hawa, de 3 años, llegó desde Mauritania en septiembre muy malita del corazón. Gracias al equipo de cardiología liderado por el doctor Ricardo Gómez y gracias a los cuidados de Lidia y Jesús, su familia de acogida, Hawa está a punto de reencontrarse con su familia biológica en Mauritania.

Estos traslados son posibles gracias al programa »Viaje hacia la Vida», que ya ha intervenido en hospitales españoles a más de 650 niños y niñas africanos gravemente enfermos.